Inscrita recientemente en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, por la UNESCO, la Pirekua, es uno de los elementos culturales más representativos de la música vocal del pueblo indígena purépecha, que se asienta en el Estado de Michoacán. Si bien la palabra pirekua literalmente significa el canto, la pirekua es sobre todo una forma musical propia, que retoma los dos ritmos tradicionales del son michoacano, el sonecito son regional, caracterizado por su ritmo lento (en compás de 3/8) y más propia de celebraciones rituales, en contraste con el son abajeño, de ritmo alegre (en compás de 6/8) y por lo general bailable.
La pirekua se expresa entonces en estos dos ritmos, pero además, tiene una estructura propia, es decir, no cualquier canción ejecutada en lengua purépecha es una pirekua, la forma y estructura de la “letra” responde a patrones tradicionales que hacen que pueda ser considerada una pirekua.
Generalmente la composición consta de dos partes, en la primera se presenta el tema sobre la que versa la canción en cuestión y de alguna manera el “problema”; y en la segunda se narra el desenlace o de que manera se resuelve el asunto planteado, esto por supuesto, dicho en términos muy generales, pues la estructura es mucho más compleja, pero sirva lo anterior parafines ilustrativos.
La ejecución de la pirekua es binaria, es decir, se ejecuta la primera parte dos veces y la segunda otras tantas, para concluir con ambas partes, a manera de recapitulación. La forma más generalizada y si se quiere “antigua” de acompañamiento musical de la pirekua, es con dos guitarras que, por lo general ejecutan los propios pireris una guitarra hace la veces de requinto y dará las introducciones y adornos musicales intermedios y la otra guitarra hará el acompañamiento respectivo, cabe hacer notar que los acordes y rasgueó y afinación responden a criterios que han hecho suyos cada comunidad.
La pirekua por lo general es interpretada a dos voces en intervalos de terceras o sextas, puede ser con voces masculinas, que según los estudiosos en la forma más antigua que se registra pero hoy en día lo encontramos también con voces femenina, mixtas o grupos corales. También recientemente se dio con mucho éxito la ejecución de la pirekuaa compañada con banda y entre los jóvenes gusta el que se acompaña con instrumentos eléctricos.
Muy variada es la temática que aborda la pirekua, destacando con mucho los temas amorosos donde se compara a la mujer con los atributos y belleza de las flores, así es posible con el sólo titulo de las pirekuas darnos cuenta de esta metáfora. (Tsïtsïkiurapiti:flor blanca, tsïtsïkisapichu: pequeña flor, toronjiltsïtsïki: flor de toronjil).
Además la pirekua narra en su temática hechos históricos, locales y nacionales, fenómenos naturales, problemas sociales (migración, desempleo, alcoholismo, etc.)preocupaciones por el medio ambiente y otras muy variadas preocupaciones. Se puede decir que una de las funciones de la pirekua es servir de memoria histórica-musical dela región y década comunidad.
A pesar de que se comparte los elementos generales ya descritos, cada comunidad mantiene rasgos de ejecución muy particulares y que permiten diferenciarse de la pirekua de las otras comunidades, así sea en detalles como la afinación, el manejo delos requintos, los tonos vocales, y la complejidad y versatilidad en el uso de la lengua purépecha, pues es importante hacer notar aquí, que para composición de la pirekua, es necesario tener un excelente manejo de los recursos melódicos de la propia lengua, así como una métrica muy particular para que la pirekua sea tal.
Uno de los espacios donde se puede disfrutar de las pirekuas, además de las calles, donde en la tarde noche se puede escuchar cantar a jóvenes y señores al calor de una fogata, es en los festivales y pequeños concursos que previo a las fiestas patronales suelen organizarse, allí no solo queda manifiesto el talento y habilidad para el canto y la composición sino que además generan vínculos inter e intracomunitarios que le dan a la pirekua su vocación social.
Estas y otras características fueron algunos de los criterios que se consideraron para el reconocimiento de la pirekua, como patrimonio mundial, pero ante todo, patrimonio del pueblo purépecha.