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Alberca los espinos

Una de las maravillas de Michoacán es la misteriosa alberca de los espinos cerca de Zacapu. Se trata de un cráter volcánico en cuyo centro se encuentra un lago y que según la leyenda tiene conexión directa al océano e incluso los lugareños cuentan sobre una misteriosa serpiente marina que habita sus aguas.

Este extinto volcán en cuyo interior se encuentra un hermoso lago u “ojo de mar” por el verde intenso de sus aguas, se encuentra en el municipio de Villa Jimenez.

Ubicado a unos 15 minutos de Zacapu y alrededor de hora y media de Morelia, constituye un excelente lugar para visitar.

Este tipo de sistemas volcánicos conocidos como “axalapascos” son raros y muy importantes para esta región de México, ya que sólo se conocen otros dos conos con lagos cratéricos en el Estado de Michoacán (La Alberca de Teremendo, en Morelia y la Alberca de Tacámbaro, Michoacán).

La Alberca te regala sensacionales paisajes y una belleza indiscutible para todos nuestros sentidos. Tanto su flora y fauna te embelesarán y darán una sensación de armonía, de paz y relajación.

Entre la flora que se puede encontrar está el nogalillo, partorilla, colorín, matorral subtropical, copales, zapotes y capulín.

A la orilla del cuerpo de agua se presenta el bosque de galería, con la asociación de dos especies arbóreas: sauce, fresno y una arbustiva, el carricillo. En el interior del cráter se presentan tres tipos de vegetación: matorral subtropical, en la que predominan los cedrillos (Cedrela dugesii), Tepehuajes (Lysiloma acapulcencis) y los conocidos sauces llorones.

Su fauna está compuesta por zorros, gato montes, tlacuaches, conejos, venados y diversas aves.

Culturalmente “Los Espinos” ha sido lugar de esparcimiento y recreación, principalmente de los habitantes de las poblaciones cercanas. También ha sido un lugar de culto a Santa Teresa con la celebración de misas hasta hace pocos años.

Se declaró Área Natural Protegida de jurisdicción estatal, con el carácter de Zona de Preservación Ecológica.

Hay cenadores para que puedas llevar alimentos y consumirlos en el lugar, también cuenta con un bosque y un camino de sendero por el cual se puede realizar ejercicio. No tiene costo de entrada, solo una aportación voluntaria para la conservación del lugar.

La alberca de los Espinos es sin duda la conjugación de naturaleza, belleza y patrimonio inmaterial.

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